Emergencia sanitaria desacelera arriendos de oficinas y expertos prevén impacto en clase premium

El avance del Covid-19 junto a la cuarentena en comunas del sector oriente de la capital, justamente donde se concentra el mercado de oficinas, impactó en los niveles de arriendo de estos espacios al cierre del primer trimestre del año.

En el período analizado, se absorbieron 15.217 metros cuadrados (m2), una disminución de 54% en 12 meses y 70% menos que el trimestre anterior, según datos de CBRE Chile.

"No habíamos visto estos niveles de absorción a nivel trimestral, hay una desaceleración generalizada a nivel país que se empezó a gestar con la crisis social y se profundizó con la crisis sanitaria", dice Ingrid Hartmann, senior research manager de la firma.

Agregó que "si bien ambos factores han sido muy incidentes en los resultados del período, esta desaceleración también es un problema de arrastre que responde a la escasa oferta disponible que estamos viendo desde hace un par de años. Desde el punto de vista del desarrollador, los desafíos son grandes en términos de la adquisición de terrenos, principalmente por el estado de avanzada consolidación de los submercados tradicionales".

Pese a lo anterior, la vacancia de oficinas clase A+B mostró "niveles saludables" de 5,5%, incluso por debajo del consolidado anual de los últimos años.

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Hartmann explica que esto se dio por la mayor actividad de oficinas clase B, un mercado de gran diversidad, que atiende tanto a corporaciones como a pymes. "Cuando descomponemos la vacancia por clase, vemos un alza leve en la clase A, tendencia que se podría mantener para el resto del año dependiendo de la duración de la paralización producto de la pandemia", dice.

En esto coincide Ariel Benzaquen, country manager de Cushman & Wakefield Chile, que señala que el contexto actual tendrá especialmente un fuerte impacto en el mercado de las oficinas de más alto estándar.

"La rápida propagación del Covid-19 en Chile tiene a gran parte de las empresas haciendo teletrabajo, por lo mismo la economía está funcionando a su mínima capacidad, con una caída relevante de ingresos y muchos gastos fijo. Y en particular, en el segmento de arriendo de oficinas premium, se está viendo cómo las empresas que arriendan están comenzando a negociar con los landlords (propietarios de los edificios de oficinas), para obtener descuentos o la posibilidad de suspender los pagos por algunos meses", dice Benzaquen.

Explica que ningún contrato de arrendamiento contiene alguna cláusula que permita a las partes deshacer el contrato por causas como una pandemia, "pero para los landlords sería razonable ceder ante estas peticiones debido al contexto económico que se está viviendo, donde no sería propicio salir a buscar nuevos arrendatarios".

Repunte hacia el segundo semestre

Previo a este escenario, señalan desde CBRE, "el mercado de oficinas se encontraba en una posición robusta con tasas de vacancia saludables y con volúmenes de demanda estables, lo que sigue posicionando a este mercado en un escenario positivo hacia el segundo semestre".

Por esto, Hartmann asegura que los efectos observados tendrán una duración limitada. "Es esperable que el resto del año sea activo en términos de reactivación, pues todos los esfuerzos públicos y privados apuntan a eso", concluye.